domingo, 16 de diciembre de 2007

Cuando....


Cuando es mejor no hablar, ni pensar, ni lamentar...
Cuando la mirada se distrae y las manos se duermen....
Cuando no sé bien el por qué,ni el cómo ni el cuándo...
Cuando me despierto a medianoche y estás lejos de mi espalda....
Cuando te hablo y no me entiendes, cuando tu lo haces y yo me pierdo...
Cuando no quiero volver la vista atrás y mis pasos se esfuerzan por andar...
Cuando fijo el rumbo y el timón parece seguir dando vueltas ante mis ojos...
Cuando paro, respiro, sigo, y vuelvo a parar, respirar, seguir...
Cuando me siento más humilde que nunca y me ponen la corona y el altar a mis pies...
Cuando pienso que lo estoy dando todo y a ti todavía te falta más...
Cuando no queremos herir pero las ironías se camuflan entre tanta palabrería...
Cuando no quiero llorar y aprieto los dientes pero una lágrima se desliza hasta mis labios...
Cuando sólo pienso en soñar, en volar alto y regalar sonrisas de fresa al viento...
Cuando mis ojos te buscan y sólo pretenden encontrar una sonrisa...
Cuando parece que no hablemos en la misma melodia ni compás...
Cuando abro los ojos y me arranco la venda...
Cuando me pellizco para saber que esto es real...
Cuando me mojo la nuca y las muñecas para mantenerme en pie, para poder respirar...
Cuando te miro a los ojos, sólo cinco segundos y nos empezamos a besar...

lunes, 10 de diciembre de 2007

¿Jugamos al escondite?


Mi pequeña Lara, sólo unas semanas de vida y ya empiezas a sufrir más que muchos de nosotros en tantos años...


Mi pequeña Lara, saca fuerzas de tus entrañas y demuéstranos a todos que puedes vencer esta lucha aún sin poder mantenerte en pie todavía.


Mi pequeña Lara, grita fuerte para que el mundo te oiga, para que sintamos que estás más viva que nunca.

Mi pequeña Lara, no dejes de respirar, no lo hagas ni un sólo segundo, que yo te cuido. Sé fuerte mi niña, te prometo que todo pasará y pronto jugaremos en el parque, pronto correremos junto a Fibi en las montañas de tu ilusión.


Mi pequeña Lara, abre los brazos y siente toda la energía que te mando con sabor a fresa. Respira por tus compañeros, por mi y por ti primero....juega al escondite conmigo pero no te escondas mucho más, que sepa donde irte a buscar después de contar hasta diez...

Uno, dos, tres, cuatro, cinco, seis, siete, ocho, nueve...diez...

...Voy en tu búsqueda y captura. Pienso desnudarte de cables y sondas, raptarte para que puedas soñar por fin en tu cuna.


Mi pequeña Lara, mi ilusión de invierno, mi regalo de navidad, mis reyes antes de tiempo. Agárrate fuerte a esa sabanita que te cubre el cuerpo, agárrate tan fuerte como queriendo no marcharte nunca, como queriendo demostrarnos a todos que eres mucho más especial de lo que imaginamos.


Mi pequeña Lara, muerde el miedo, grítanos que quieres volar muy alto y abrazarnos como si nubes esponjosas fueran nuestros corazones.
Abre los ojos, mira a tu alrededor y sonríe a esos padres que te buscan en la oscuridad. No dejes que el cristal que os separa divida dos mundos, dos realidades, dos vidas....posa tu mano junto al reflejo de las suyas....respira con ellos, lucha con ellos, vuela con ellos, sueña con ellos....vive con ellos.

viernes, 7 de diciembre de 2007

A ti, claro que te escribo...


...Aunque tu no lo sepas,
aunque estés ahora mismo sentado delante de mi,
aunque pienses que estoy mirando el correo,
aunque te mire por encima de la pantalla y te sonría.


Aunque creas que mis letras se las regalo al innombrable,
dejé de escribirle hace mucho tiempo.

Parece que te sorprendas,

pero si, a ti claro que te escribo...


Aunque sigas buscando hojas por todos los rincones de mi casa,
Aunque nunca leas estas letras ni todas las que tengo en el cajón.
Aunque te regale sonrisas e ilusiones a precio de coste.

Si, a ti claro que te escribo.


Aunque tu no lo sepas,
el salitre se adhiere a mi piel cuando contemplo la luna.

Me impregno de ti como si quisiera no borrar el olor que dejas en mis pliegues.


Te odio, te odio tanto y eso si que lo sabes...

que me engancho de tus labios cada vez que puedo para morderlos,

para devorarlos y saciarme del hambre que siento cuando no estás.

A ti, claro que te escribo...
aunque tu no lo sepas.

Escribo a tus ojos, susurro a tus labios, acaricio tu nariz,
Beso tus pies, me enredo en tus orejas, bailo sobre tus manos...


" - ¿Cuando has escrito esto?
- Eso... (pienso mientras observo el blog de notas que tiene en sus manos), hace mucho tiempo. ¿Dónde lo has encontrado?
- Estaba ahí encima (señala unos libros encima del piano), será porque lo has releído hace poco...
- No, no me acordaba dónde tenía esas hojas...

- Claro... ¿ y a mi no me escribes?

- A ti, claro que te escribo
.
- Sí, seguro...

- Te escribo cosas muy bonitas, cosas que nunca leerás...

(él sonríe...)

(yo le muerdo los labios...y empiezo a escribirle este post)"



Para Otto.

sábado, 1 de diciembre de 2007

Los ojos de Lara



Lara,
Has llegado por sorpresa,
silenciosa, escondida, sin dar lugar a presentaciones...
Has llegado abriéndonos los ojos a todos los que te rodeamos.

Me hablan mucho de ti aún habiendo 500 kilómetros que nos separan.
Aún así ya te siento cercana,
tan próxima a mi que parece que te cierre los ojos antes de dormir.

Lara,
Has llegado al alma de mucha gente sin hablar.
Simplemente con tu mirada
has conseguido empapelar los corazones que te envuelven
para hacerlos más fuertes,
hacerlos resistentes a todos los golpes que quedan por llegar...

Lara,
Has llegado como una princesa a un cuento desencantado
en el que los príncipes y los castillos están por inventar...

Estos días te sueño repleta de ternura,
de abrazos, de balbuceos...

También te sueño envuelta en una pesadilla
dónde las sonrisas son forzadas,
las palabras falseadas
y los pensamientos omitidos.

Pero no te preocupes,
tú mejor que nadie comprobará que la vida no es fácil,
que la sociedad está ciega
y que los apoyos muchas veces son escasos.

Pero no te faltarán besos,
ni te faltarán caricias,
tampoco nanas que te cierren los ojos,
ni una mano cuando tropieces.

Lara,
Has llegado envuelta de algodones,
recostada entre nubes
y acunada por una luna menguante.

No te faltarán sueños,
ni faltarán esperanzas,
llevarás la sonrisa llena de ilusiones
y la mirada repleta de felicidad.

Tendrás más amor del que llevas dentro,
Mi niña, mi bebito, mi cosita...

Todavía no te he visto
y sé que serás la ilusión de mi vida.


domingo, 25 de noviembre de 2007

El Círculo Polar


No me llamó para decirme todo lo que pedía en el anterior post, ni quedó conmigo en ningún lugar en el que fuera el último que compartiéramos, ni me escribió una carta de despedida... Me despertaron sus brazos rodeándome a medianoche, pensé que seguía soñando, pero al volverme y ver como fijaba sus ojos en mi, recordé que todavía tenía una copia de llaves de casa. No pensé nada, últimamente me he convencido de que pensar más de la cuenta no es bueno. Seguimos durmiendo, tan abrazados, que apenas dejó que se me escaparan los sueños. Y así hemos estado dos días, tan egoistas que no dejábamos ni al aire pasear entre nuestros cuerpos. Mirándonos a los ojos y sabiendo que lo nuestro ha sido lo más especial que hemos compartido con otra persona. Rozando nuestros labios, sellándonos los ojos, mimándonos el alma. Ambos sabemos que lo nuestro ha terminado, pero esta forma de despedida ha sido el mejor modo de confesarnos que el amor sigue existiendo en nosotros. Curiosa despedida si, pero nos hemos regalado hasta el último suspiro de esta magia que siempre nos ha envuelto. Él me ha convencido de que es mi Otto y yo su Ana, que algún día, en algún exacto momento, en algún círculo polar nos volveremos a encontrar. Y yo pienso que soñar es sentirse viva, por qué no iba a suceder?? Ahora es tiempo de volar más alto que nunca, tiempo de rozar el cielo y caminar por nuevas calles. Tiempo de nuevas ilusiones, esperanzas y objetivos por cumplir. Tengo a Bebe como banda sonora de mis próximos días, y sí, sé que todo irá bien. Lejos, me marcho lejos de esta casa para empezar un nuevo ciclo, una nueva etapa, una nueva vida. No sabeis cuanto amor me llevo...

martes, 20 de noviembre de 2007

Olvídate de mi

Llámame, hazlo sólo para decirme que todo se acabó, que no puedes seguir más. Búscame, y hazlo sólo para encontrarme en algún lugar en el que sea el último en el que nos veamos. Dime que no me quieres, aunque mientas, pero dime que la sonrisa se te apagó. Que no me hechas de menos. Que cada noche cuando te recuestas sobre la cama no tienes ganas de abrazarme. Dime que ya sabes en qué emplear las manos si no estoy cerca. Dime que te encanta cocinar sólo para ti. Llámame y confiesame que mis ojos ya no son los tuyos, que no tienes ganas de morderme la boca cuando me ves. Dime que podrás vivir sin mi, sin tenerme cerca, sin la luz que aporto a tus días. Escríbime una carta de despedida, de esas en las que la posdata es un "nunca te olvidaré", aunque te olvides de enviármela. Dime que cuando paseas por nuestra playa ya no buscas mi mano, ni mis pasos, ni mis besos. Llámame, si, hazlo para gritarme, para llorarme, para decirme que te parece bien la idea de que me marche lejos. Déjame, tírame a la basura en la primera esquina que te pille cerca. Dime que no soy lo mejor que pasó por tu vida. Dime que has querido a otras más que a mi. Dime que la distancia nos ayudará a olvidar nuestros rastros. Dime que has quemado el possit de planes que teníamos por hacer. Dime que ya no sonríes cuando mis orejitas se hacen hueco entre mi pelo. Confiésame que tu vida ahora es perfecta sin mi. Hazlo si, tengo las tiritas en una mano y el corazón en la otra. No me harás daño, este frío me ha dejado el corazón tan helado que apenas podré sentir que lo partes. Mírame a los ojos cómo tu siempre hacías y dime que los tickets que Quique nos ofrecía tienen fecha de caducidad. Dime que la magia se esfumó. Prométeme que ya no tendré cuentos antes de dormir. Dime que no me llamarás. Júrame que nunca volverás a desearme. Dime que nunca volverás a vivir conmigo, que odias mi forma de cocinar y el modo en el que te doy los buenos días. Dime que prefieres contemplar la luna solo. Dime que ya no te gustan mis ojitos cuando te observan de reojo. Dime que mi piano nunca sonará para ti. Abrázame sin ganas, bésame en la frente, odiame si puedes. Ayúdame a terminar con esto. Ayúdame a sentirme mejor cuando me vaya, cuando los kilómetros nos separen más que nunca. Dime que no soportarás la espera, que nuestros momentos no pueden coincidir. Miénteme, aunque a ti también te duela. Odiame, aunque a mi también me duela. De alguna manera tendré que olvidarte, tengo que olvidarte de alguna manera.

lunes, 19 de noviembre de 2007

Preguntas



¿Qué queda dentro de tí?
¿Qué queda dentro de mi?
¿Qué nos regalamos?
¿Qué nos ofrecemos?
¿Qué nos decimos?
¿Qué no nos decimos?
¿Qué nos aportamos?
¿Qué queremos tener en nuestras vidas?
¿Qué no queremos tener en nuestras vidas?
¿Qué no surje?
¿Qué no brota?
¿Qué no fluye?
¿Qué se nos escapa?
¿Qué no agarramos?
¿Qué veo?
¿Qué ves?
¿Qué no veo?
¿Qué no ves?
¿Qué sucederá contigo?
¿Qué sucederá conmigo?
¿Quién eres?
¿Quién soy?


viernes, 16 de noviembre de 2007

Me marcho a otro lugar...

Un lugar donde no me acuerde de que existes,
donde mis ojos no sueñen con los tuyos,
donde mis recuerdos se lleven lo mejor que fuiste.
Me marcho donde te vea desde la distancia
cuidándome, mimándome, queriéndome...
... como siempre hiciste sin miedo a perder.
Tu amor incondicional se apagó....
El mio creo que seguía respirando....

domingo, 11 de noviembre de 2007

Tengo ganas de llorarte...


...para desdibujar las huellas que quedan en mi cuerpo con tu nombre.


viernes, 9 de noviembre de 2007

¿Necesitas tiritas?



"Las casualidades son las cicatrices del destino"

(La Sombra del Viento)



jueves, 8 de noviembre de 2007

Quizás, Quizás, Quizás


Fué divertido soñarte cada vez que me imaginaba una vida sin ti, quizás ahora no me haga tanta gracia saber que te perdí. Es curioso como hay momentos en nuestras vidas en las que no sabemos qué queremos. Y otras en las que aún teniéndo muy claro lo que quieres, y de repente lo consigues, ya no sabes qué hacer con ello. Dónde guardarlo, dónde meterlo, qué decirle y ni saber si llevártelo a tu cama esa misma noche.

Mucha gente me dijo y me sigue diciendo, que cuando deseas algo de verdad, algo sincero y con todas tus fuerzas se llega a cumplir. Es como aquella frase del Alquimista en la que asegura que si deseas algo con tal fuerza el universo entero conspira para que se haga realidad. Yo, aún no creyéndomelo a ciencia cierta siempre lo pedía. Siempre en mitad de mis meditaciones dedicaba unos minutos para desearlo con todas mis fuerzas. Siempre me fijaba en algún punto en el que proyectaba toda mi energía y la mandaba a la nada, al universo, a la naturaleza, a qué se yo qué o quién me escuchara en ese momento. Lo hice durante un par de años (para que tengais claro que este servicio de correo es muy lento), y nunca desesperé, siempre pensé que algún día conseguiría que mi deseo se hiciera realidad.

Vale, ya sé que estareis pensando....que cuando alguien desea algo de verdad lucha por conseguirlo. Que se deja la piel en cada intento e insiste en escoger el camino que le llevará hasta verlo realidad entre sus manos. Pues si, en eso no os voy a quitar la razón. Pero cuando es un deseo que no depende exclusivamente de ti, cuando envuelve sentimientos, emociones, actos, gestos.... en otras personas.... es más complicado. Tú puedes dedicarle todo el tiempo que creas necesario, pero tu trabajo se quedará ahí. Luego toca esperar la respuesta, la consecuencia de tus actos, el resultado de lo luchado....y eso ya no depende de ti.

Bien, pues yo lo conseguí hace un tiempo. Conseguí tener todo lo que pedí. Del mismo modo que lo soñé y con las mismas palabras que tanto deseé. Y qué pasó?? Que me asusté. Que en ese momento de mi brotó el miedo y la inseguridad que nunca pensé que albergaba. Me asusté tanto que no quise aceptarlo aún cuando ahí lo tuve, delante de mis ojos y con una bandeja en sus manos en la que depositó todo lo que era. Me asusté si, y aún estando en el camino que quería, con mi deseo hecho realidad a mi lado, me di la vuelta y empecé a correr. Es curioso lo que el miedo llega a hacer cuando lo tenemos en vena.

Y si, cometí el error de empezar a caminar en dirección contraria. Y así te perdí. Yo me escondí en mi misma y he tardado tiempo en volver a encontrarme. Todavía estoy en ello, esta casa está tan vacía y al mismo tiempo tan llena de rincones que seguramente en alguno de ellos me escondí. Me quedé acurrucada en el suelo y mis alas hicieron de caparazón.

Te perdí quizás por desearte tanto.
Quizás por miedo a perderte aún sin
darme la oportunidad de antes tenerte.
Quizás por ser tan racional.
Quizás porque no era el momento.

Quizás, Quizás, Quizás...

miércoles, 7 de noviembre de 2007

Se me enredan los pensamientos


Voy paseando por caminos de tierra encontrandome arbustos que arañan mis ojos, raices que se entrelazan entre mis manos y hojas secas caidas por el tiempo que voy pisando a cada paso. Intento no hacer ruido en noches tan silenciosas como ésta, pero mis manos cantan y susurran melodías que recuerdan mis sentidos. Me encuentro rodeada entre una tela de araña que hace de refugio para mis alas. No recuerdo la noche en que te regalé mis besos, ni recuerdo tus dedos dibujando círculos sobre mis pezones. La luna se esconde tras mi universo y mi realidad se confunde con mi deseo. Sigo caminando a oscuras entre árboles barrocos y ojos de lechuzas que alumbran mis pasos. Mi respiración se entrecorta y mis labios escuchan el rugido de las olas tras chocar con tu cuerpo. Te pierdo tras el océano de mi imaginación por no agarrarte desde mis sueños. Rompo las ramas que me impiden seguir caminando al igual que rompí los lazos que me unían a ti. Miro hacia arriba intentando escapar del recuerdo y las nubes se abrazan unas a otras para llorar sobre mi tu pérdida. La lluvia me empapa hasta desdibujar la imagen que me quedaba de tus ojos. Siento frío en esta noche tan cubierta y apagada. Mis pasos se detienen a la orden de mis sentidos. Ya recuerdo, recuerdo que te invité a una copa de adiós, bebiéndome mi propia alma para dejarla albergada en mis entrañas.

domingo, 4 de noviembre de 2007

Vamos a apagar la luz para soñar



Vamos a apagar la luz para olvidar nuestras malas caras
y envolvernos del olor del mar

Vamos a apagar la luz para esconder nuestras palabras
y fundirnos del tacto de nuestra piel,
de estremecernos al rozarnos

Vamos a apagar la luz para caminar a oscuras
y saber que cogidos de la mano podemos llegar hasta donde queramos

Vamos a apagar la luz para respirar juntos
y equilibrar nuestras energías

Vamos a apagar la luz para besarnos
y rozar el cielo de placer

Vamos a apagar la luz para seguir enamorándonos cada vez que soñamos

Vamos a apagar la luz para reirnos del sol y la luna,
para gritarles que nosotros también nos tenemos como se tienen ellos

Vamos a apagar la luz para reirnos de todo menos del
olor de la ausencia, de nuestra ausencia

Vamos a apagar la luz y aprender a mirarnos a los ojos en la oscuridad

viernes, 26 de octubre de 2007

Volar


Podemos jugar a volar de nuevo
a rescatar ese olor que se queda en el recuerdo
ese olor que a todos nos caracteriza, dándo imágenes al pensamiento

Podemos jugar a volar muy alto
a dibujar siluetas enroscadas entre sábanas
a enmascarar prejuicios infundados en la piel.

Volar hasta tocar el perfil de la luna
a rozarla suavemente con la yema de los dedos
soñando devolver luz a miradas dormidas.

Volar hasta sumergirnos en la profundidad del mar
a escondernos tras las algas impregnándonos de su textura rugosa,
manchándonos de arena mojada para secar después los recuerdos al sol.

Volar, Volar, Volar....

Abrir la ventana de la imaginación y esbozar sueños de color azul
como azules eran tus besos,
esos besos que todavía recuerdo.

miércoles, 24 de octubre de 2007

Vaho en el cristal


El día se ha vuelto gris, las nubes se han unido con fuerza dejando un techo cubierto por donde el sol no puede pasar. Empiezan a caer las primeras gotas de lluvia en la calle, me acerco a la ventana y mi respiración empaña el cristal. No escribo nada en esa pizarra de vaho, simplemente me quedo observando como poco a poco desaparece....igual que desaparecemos tu y yo.


Danzo por casa, esta casa tan vacía sin ti. Sigo con el pijama puesto a pesar de ser las siete y media de la tarde, casualidad que sea esta hora?? Puede ser, ya que Ivan Ferreiro me susurra Extrema Pobreza a los oídos;


Y repetimos los errores
que si antes eran grandes
ahora son enormes y
lamentamos no tenernos uno al otro
y darnos flores
que nos alivien en un instante
cambien todo y nos perdonen

Nuestra falta de cabeza
es peor que la pobreza
porque no nos ha dejado tener nada

Este amor se apaga
como se apagan los latidos de tu amor
como terminan mis canciones que no acaban
este amor... se apaga .


Se apaga, Se apaga....pero yo me tapo los oídos con ambas manos, las aprieto, las aprieto tan fuerte que me retumban los pensamientos, aunque no me preocupa, ya no pueden desordenarse más de lo que están.


El reloj sigue funcionando, pero me dedico a compartir los minutos con la chica que fuí. Sabes? Hacía mucho tiempo que no quedaba con ella. Pobrecita, ella que tanto me ha llamado en todo este tiempo y yo sin cogerle el móvil... Ahora tenemos tanto de qué hablar, tanto que contarnos, que apenas duermo para ponerme al día de todo lo acontecido este último año. Poco a poco me va hablando de las cosas que han pasado en su vida en el tiempo que llevamos sin vernos. Yo también le voy contando algo, pero apenas me deja hablar. Está tan ilusionada con haberme visto de nuevo que me abraza cada dos minutos fuerte, muy fuerte, como queriendo que no me escape de nuevo. Qué mala amiga he sido, lo reconozco. Ahora se pasa casi todo el día queriendo quedar con mi gente. Nos tiramos a la calle y tomamos cañas con mis amigos. Nos reimos, había olvidado que ella nunca borraba la sonrisa de sus labios. Hoy la he llevado a comer a casa de mis padres para que viera a mi perrita...parecía que iba a estallar de tanto amor. Me he prometido no volver a dejarla ni un segundo sola, hasta le he pedido que se quede a vivir conmigo ahora que estoy sola en casa.

Qué bien vamos a estar juntas de nuevo. Le propongo hacer más cosas, pero ella me sienta en el sofa y se empeña en seguir hablando conmigo, en contarme todo lo que ha hecho en este último año. Y yo la escucho, la escucho atentamente mientras le sujeto las manos. La miro fijamente a los ojos.... Sé que no miente, sé que dice la verdad.

Ambas nos acercamos a la ventana, vemos la calle mojada. Ambas respiramos tan profundamente, que volvemos a empañar el cristal. Ahora si que decido escribir sobre el vaho un mensaje para ella:

Quédate a mi lado.




lunes, 22 de octubre de 2007

Nuevo Propósito Conseguido


Me he despertado más pronto de lo habitual, por fin el sol me daba en la carita y conseguí sonreir antes de abrir los ojos...que sensación más dulce, no la recordaba.

Es increible a veces como los amigos parecen tener un sexto sentido, como si mi energía hubiera salido de casa (claro, ya lo entiendo, salió por la ventana, como dejé la persiana a la mitad esta noche...jeje) y les hubiera rodeado el cuerpo en forma de abrazo....quizá por eso hoy sonaba mi móvil y los sentía más cerca que nunca. Qué sería de nosotros si no tuvieramos los abrazos que necesitamos en los momentos críticos, estos (los abrazos, no los momentos críticos) nos ayudan a dar el paso hacia delante, nos ayudan a seguir caminando aunque tropecemos siempre con la misma piedra (la muy jodida, que parece que nunca le llego a dar la patada suficientemente fuerte como para enviarla al rellano de mi vecina y aquí sigue, delante de mi puerta).

Esta mañana siento que el sol brilla más que nunca, quizá sea porque las últimas semanas han sido un tanto lluviosas, un tanto nubladas... Y aquí sigue mi sonrisa, como si la hubiera dibujado con rotulador permanente sobre mis labios.

Hoy tarareo estrofas de una de mis canciones favoritas desde hace ya diez años...

Se ha secado el río que me llevó a tí;
me he perdido en el camino que contigo aprendí;
ya no brilla la luz que me llevó a tu vera.

Llevo semanas pensando qué hacemos aquí;
creo que ya no me acuerdo si algún día fui feliz;
nunca tuve tanto frío, frío estando a tu lado.

Todavía sigo preguntándome porqué siempre me aficiono a las canciones tristes..

domingo, 21 de octubre de 2007

La persiana de mi habitación


Hace tiempo que mis ojos no se despiertan al ver la luz del sol entrando por la ventana de mi habitación, él me convenció para cerrarla por las noches antes de meternos en la cama ya que le molestaba la luz para coger el sueño... Ahora pienso que quizá eso haya influido en que mis días sean un tanto más nublados, más tristes, más apagados.

Parece increíble como ha pasado el tiempo, yo, experta en la resolución de conflictos, experta en sonrisas, experta en ver el lado positivo de las cosas, experta en no dejarme caer por nada ni nadie...y ahora me cuesta levantar la mirada, me cuesta arrancar el "no" en el comienzo de mis frases, me cuesta salir a la calle y
sonreir a desconocidos como siempre hacía... A veces las cosas no salen como uno espera, es bastante difícil aceptar las situaciones que uno se va encontrando si ni siquiera las había anotado como borrador en el possit de "posibles situaciones reales". Pero cuando pisas el mundo real, cuando desciendes de las alturas en las que te encuentras es cuando eres consciente que la nube en la que viajabas sólo es segura en el cielo, pero no en la tierra.... Y qué voy a hacerle yo....si me encanta soñar....

Y como hoy empieza una nueva vida para mi (como nos gusta decir esa frase cuando todo va mal y esperamos divisar un haz de esperanza), dormiré con la persiana subida, bueno, la dejaré a la mitad ya que ha empezado a refrescar por las noches, jeje.Y antes de cerrar los ojitos me imaginaré enganchada de una estrella, para así soñar que vuelo, que vuelo muy alto, tanto que llego a ver esa otra cara de la luna que dicen que esconde (qué curioso, hasta la luna tiene sus miedos).

Mañana por fin me abrirá los
ojitos la luz del sol, espero que no me llegue a molestar algo que tanto me ha gustado. Quién sabe, hace tanto tiempo que él me "invitaba" a cerrar la persiana antes de dormir que quizá hasta eso me lo haya pegado antes de irse de casa.

Mañana cuando me despierte, prometo
sonreir.